En la actual campaña de Renta 2016 no se implementan grandes reformas fiscales, ya que las mismas fueron objeto de introducción en la correspondiente a 2015. Las principales novedades se centran en un menor porcentaje de retención (reducido al 19%), fundamentalmente en rentas del capital y ganancias patrimoniales (a considerar para los pagos a cuenta),
De esta forma, las Comunidades Autónomas tienen potestad para moldear el IRPF, adaptándolo a sus territorios mediante una escala de gravamen autonómico propia que se aplica a la base imponible general del impuesto (formada por el grueso de las rentas de la mayoría de contribuyentes: rendimientos del trabajo, rendimientos del capital inmobiliario, imputaciones de renta