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Cada vez son más los inversores preocupados por factores como la transparencia, el buen gobierno, la sostenibilidad, los proyectos sociales, el medioambiente, el cambio climático, etc. Es decir, lo que se conoce en el mercado por las siglas ESG (del inglés «Environmental, Social and Governance») y que en nuestro país se conoce como inversión socialmente responsable o fondos ISR.
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Los fondos ISR son aquellos productos que, a la hora de analizar y seleccionar sus inversiones, tienen en cuenta tanto objetivos financieros como criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo.
A pesar de sus bondades a nivel ético y social, los fondos con denominación ISR todavía escasean, por lo que las posibilidades de inversión son limitadas. Ahora bien, el interés por las cuestiones mencionadas es tal que muchos gestores de fondos convencionales están incorporando factores ESG en sus decisiones de inversión, aunque los productos gestionados no se hayan registrado como fondos ISR explícitamente.
¿Cómo puede el inversor discernir entre un fondo ISR, o preocupado por factores ESG, de otro cuyos objetivos son únicamente económicos?
Desde el pasado mes de marzo de 2016, Morningstar proporciona una nueva herramienta que nos permitirá responder esta cuestión. Es el Sustainability Rating o Rating de Sostenibilidad a través del cual los inversores pueden saber si un fondo ISR está cumpliendo con sus políticas de inversión responsable y qué fondos están llevando a cabo mejores prácticas ESG en comparación con otros fondos de la misma categoría. Para ello, el rating otorga entre 1 y 5 globos a todos aquellos fondos con, al menos, el 50% de sus activos invertidos en empresas ESG.
Pero, ¿un buen rating de sostenibilidad garantiza buenos resultados en los ratings cualitativo y cuantitativo de Morningstar? Puede o no ser así. Es decir, en el mercado hay fondos que tienen valoraciones positivas en ambos ratings y fondos que están muy bien posicionados en sostenibilidad, pero que no consiguen batir a su índice de referencia a largo plazo o viceversa. Por tanto, la utilización de estos ratings no es excluyente. Es más, lo recomendable es hacer uso de todas las herramientas con el fin de encontrar los fondos ISR que mejor se comporten a largo plazo respecto a sus competidores, pues el Rating de Sostenibilidad no aporta información sobre rentabilidad ni procesos de inversión.
Os recomiendo la lectura del artículo que se enlaza al pie de este post, pues nos da una visión más amplia sobre la aplicación de los criterios ESG por parte de las empresas a nivel mundial.
Un saludo
Lidia Olmos (Profesora del Máster en Asesoramiento Financiero y Seguros de la UPV)
Artículo: ¿Cómo puntúa España en el Atlas de Sostenibilidad Morningstar?